Parir un libro no es tarea fácil. La idea está en tu cabeza, necesita salir, necesita ser plasmada, necesita de palabras. Te enfrentas a la hoja en blanco o, en muchas ocasiones, a la pantalla en blanco, y dejas que, como impulsos eléctricos que son, esos trocitos de irrealidad viajen de tu mente a tus manos.
Cada escritor, o artesano de la palabra –definición mucho más correcta y hermosa-, tiene su método. El mío es como yo: puro caos. Escribo trozos, ideas, frases, conversaciones, sensaciones que luego deben transformarse en oraciones coherentes,… Las escribo en un documento de Word, en un correo electrónico, en una hoja sucia, en mi cuaderno, en el margen de la agenda, en la contraportada del periódico, en una servilleta,… Para luego tratar de aglutinarlo todo y darle una estructura y orden lógicos.
Una vez finalizado el primer borrador hay que leer y releer en busca de faltas, redundancias, expresiones poco claras, errores de sintaxis,… Fallos. La experiencia me ha demostrado que cien ojos ven más que dos, así que, para esta labor cuento con mis colaboradores, amigos con cierto grado de neurosis dispuestos a cazar la errata y a despellejarme si algo no termina de encajar.
Y, de repente, ahí lo tienes. Tu manuscrito. Recién parido. ¡Qué sensación más placentera! ¡Qué alivio! ¡Y qué vértigo!
Así, bebé aún, lo envías a los leones, a la búsqueda de la editorial adecuada. ¿Pensáis que escribir la novela es lo difícil? Esas horas, días, o semanas sin encontrar el final adecuado, esa idea que no eres capaz de desarrollar correctamente, esa conversación que suena insulsa, ese escenario que no consigues describir,… Todos esos momentos de sequía, de atasco, de desesperación incluso, no son nada en comparación con la bofetada que te da la dura realidad: un mercado saturado, un montón de buitres que ven en ti -y no en tu novela- su oportunidad de negocio, un millar de puertas cerradas y otras tantas muy difíciles de abrir.
¿Lo más importante? Esperar sin desesperar. ¿Las mejores actitudes? La paciencia, la perseverancia y la valentía. ¿Lo peor que te puede pasar? Nada, el no ya lo tienes. Hay que ir a por el SÍ. Y, en esas estamos.
PEro te queda el consuelo que publicada o no has parido una obra de arte. Es como el pintor que puede dar rienda a su "instinto". Imagínate un cineasta, lo que debe de sufrir, lo mismo que un escritor, para crear una obra, y encima no tiene la certeza de hacerla a su gusto, dinero, presiones...
ResponderEliminarAsí que mírales el lado positivo que al menos ya tienes tu creación.
Besos
Pues yo admiro a todo aquel que es capaz de finalizar una novela, de verdad, y por otra parte estoy deseando leer la tuya. Espero que pronto nos dés buenas noticias con esa búsqueda del "padre". Alguna vez he echado una mano a amigos con esas correcciones, y sé que es muy difícil buscar... pero en serio, te admiro mucho por haber sido capaz de parir una novela. ¿Nos contarás más, como el tema, nos pondrás algún fragmento?
ResponderEliminarUn beso!
Sese, te aseguro que lo miro por el lado positivo. Si consigo publicar por el medio tradicional, bien, pero si no, hay mil opciones. Para mí es un inmenso placer escribir, y terminar una obra más, solo espero poder compartirla con el mayor número posible de gente. Besos.
ResponderEliminarSonix,¡gracias! Ya os iré contando, pero poquito a poco, que todavía quiero mantener la intriga, ¡jajajajaja! Si te fijas en el subtítulo, es una frase de la novela. Ya sé que no es mucho, pero igual así puedes empezar a echarle imaginación... ¡Un beso!
Vaya, desconozco totalmente el mundo de las editoriales pero si parecen presa del mercantilismo: nombres de autores más grandes que los nombres de los libros, etiquetas de bestsellers anteriores, etc. No está mal que nos recuerden grandes obras pero cuando estas tienen a la vista más relevancia que el mismo libro uno duda de las prioridades: odio tener que buscar el nombre del libro en una portada llena de comercialidades. Creo que buscan nombre y suceso: y alli pierden autenticidad. Si una nueva celebridad se le antoja sacar su libro de pavadas o de fotos (fotos que ella no tomo) sale con gran prensa.
ResponderEliminarDestaco tu capacidad de terminar una obra (debe ser realmente dificil) y de intentar que salga al mundo (y a ese mundo). Bag Of Bones de Stephen King, que estoy leyendo, tiene ese mundillo como historias paralela: y si, no creo que King tenga problemas para publicar ahora pero al principio era uno más con su novela.
Saludos y suerte!!!
Mr. Dupin, no es difícil cuando haces algo que te gusta, que necesitas, que te apasiona. Siempre hay una primera vez, ¿verdad? Y, si otros lo consiguen, ¿por qué no voy a poder yo? Al margen del negocio, sigo creyendo que tengo un hueco reservado. ¡Gracias!
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